Tiempo lento que apisonas mi esperanza, mi fe,
que quiebras la tranquilidad
que busco en la ausencia de quien custodia mi alma.
Tiempo que inexorable marcas el ritmo de mi vida, de mi corazón marchito, golpeando suave, como la gota que
desgasta la piedra.
Tiempo que se cuela entre mis dudas y todo lo consumes ardiendo a tu paso
cuando ella esta cerca…
rápido, muy rápido….
y luego lento, muy lento…
Tiempo que poco a poco vas pudriendo lo que resta, lo que atrás dejaron las
llamas de sus besos.
Tiempo que pasas consumiéndome…
Que me consumes por dentro, tanto que ni yo mismo lo comprendo, tan adentro
que defenderme ya ni pretendo.
Xavi.