En un zarpazo llegas a mí, cierro los ojos y dueles. Eres el castigo que me cura, el fuego que apaga mi sed, la droga que me consume. Me ahogo entre sabanas y te busco, te busco desesperadamente, necesito quemarme en tu cuerpo desnudo, necesito la tortura de la libertad que me ofreces. Me anudo a tu cuerpo y eres dulce, eres almíbar que amarga, eres el deseo de mis sueños, la perfección que me destruye. Eje de mi soledad, del vacío que siento en cada momento, cada instante que no estas aguardo tu regreso.

 Contando los días, las horas, consumiendo el tiempo devoras mi vida, pero yo espero, espero en los inviernos, en la locura absoluta de mi desolación. Y llegarás, se que llegarás a mi, como el sediento regresa a la fuente, llegarás…….

XAVI